¿Te has parado alguna vez a pensar en la relación que existe entre la psicología y tu estrategia digital? Te adelantamos desde ya que se trata de una relación muy, pero que muy, apasionada. Y los arquetipos de marca, son el estandarte de estos dos amantes.
¿Cómo se transforman simples interacciones en conexiones duraderas para crear una marca de éxito? ¿Cómo se llega directamente y sin peajes al corazón de la audiencia? La respuesta está en comprender y utilizar la psicología para forjar conexiones auténticas.
Y en este sentido, los arquetipos de marca vienen a ser una especie de hilos invisibles que tejen la historia de las marcas basándose en las aspiraciones y motivaciones de la audiencia.
¿Qué son los arquetipos de marca?
¿Te gusta el cine? Entonces sabrás que en cada película hay ciertos roles o personajes que todo el mundo reconoce: El héroe, el graciosillo, la que sube corriendo por las escaleras en vez de salir pitando de su casa cuando sabe que hay un asesino dentro…
Pues en marketing digital, esos roles son lo que llamamos arquetipos de marca.
Al igual que los colores en marketing te ayudan a alinear tu imagen corporativa, los arquetipos son los que aportan personalidad a una marca. Definen el tono de la comunicación y la manera de relacionarse con la audiencia. En definitiva, son esa chispa que puede (o no) marcar la diferencia.
Y de ahí la importancia de identificar el arquetipo de tu marca. A través de él, le darás coherencia y autenticidad a tu historia.
Recuerda, la clave está en conocer a tu audiencia y saber qué tipo de “personaje” les llegará más.
Beneficios de los arquetipos de marca
Saber quién eres mola. Pero saber transmitírselo a los demás, es otro nivel. Y a ese nivel es al que toda marca debe aspirar.
Porque los beneficios de tener un arquetipo de marca en sintonía con tu público, no son nada desdeñables para tu estrategia de marketing de contenidos en particular y, para tu imagen de marca en general.
Repasamos algunos para que lo veas por ti mism@:
CONEXIÓN EMOCIONAL: Los arquetipos de marca son como un imán para las emociones. Al identificar y adoptar un arquetipo que resuene en tu audiencia, creas una conexión emocional instantánea.
GENERANDO RECUERDO: ¿Quieres que la gente recuerde tu marca? Damos por hecho que sí…Nadie quiere ser inexistente…Al asociar tu marca con un arquetipo, estás creando algo para recordar. ¿A que nunca te olvidas del personaje principal de tus películas favoritas?
DIFERENCIACIÓN: Ya sabes que nosotros llevamos la diferenciación por bandera. Destacar es clave. Y los arquetipos de marca te ayudan a diferenciarte. Si todos son héroes, ¿por qué no ser el detective que resuelve problemas? He ahí la importancia de elegir un arquetipo único que te distinga de la competencia.
CONSISTENCIA DE MENSAJE: Los arquetipos definen tu tono, voz y estilo, aportando coherencia a través de todos los canales. Así, tu mensaje se presenta de manera consistente, et voilà: Identidad sólida y reconocible para tu marca.
FIDELIDAD: Cuando la gente se identifica con la historia que estás contando a través de tu arquetipo, la fidelidad se abre paso. Es como formar parte de un club exclusivo donde todos hablan el mismo idioma. La fidelidad se fortalece cuando tu marca se convierte en un reflejo de los valores y aspiraciones del cliente.
FACILITA LA TOMA DE DECISIONES: Los arquetipos simplifican la toma de decisiones. Al tener un arquetipo claro, sabrás cómo actuar en las diferentes situaciones que puedan presentarse. ¿Eres el valiente guerrero que enfrenta los desafíos a pecho descubierto o el sabio consejero que ofrece soluciones desde la reflexión y el conocimiento? Tu arquetipo se convertirá en la guía que hará que la toma de decisiones sea más sencilla e, importante, coherente.
Pinta bien la cosa para tu identidad corporativa, ¿verdad?
Tipos de arquetipos de marca
Los arquetipos son patrones universales de comportamiento y personalidad que han existido a lo largo de toda la historia de la humanidad.
Ajustándonos al marketing, estos arquetipos son la esencia que define la identidad de una marca. ¿Vemos algunos de los tipos por los que puedes decidirte y qué supone adoptar cada uno ellos para una marca?
- Inocente: Este arquetipo busca la felicidad y la simplicidad. Representa la pureza y la positividad. Al adoptarlo se busca transmitir optimismo, honestidad y alegría.
- Explorador: El arquetipo del explorador está impulsado por la búsqueda de libertad y aventura. Perfecto si lo que busca tu marca es romper con las normas establecidas.
- Sabio: La sabiduría y la búsqueda del conocimiento son el motor del arquetipo de marca. Consiste en posicionar a la marca como experta en su campo compartiendo conocimiento para mejorar la vida de sus clientes.
- Héroe: El héroe busca superar obstáculos y plantar cara a los desafíos. Las marcas que adoptan este arquetipo suelen destacar por su valentía, determinación y capacidad para marcar la diferencia en la vida de sus clientes.
- Amante: La pasión y la conexión emocional son la esencia del arquetipo del amante. A través de este arquetipo se pretende crear experiencias sensoriales y emocionales, conectando de manera profunda con la audiencia.
- Bufón: Marcas que adoptan este papel buscan hacer reír a su audiencia y crear un ambiente ligero y desenfadado. El objetivo es crear un ambiente ligero y desenfadado para arrancar sonrisas y, ¿por qué no?, carcajadas también.
- Cuidador: La empatía y el servicio desinteresado son las principales características de este arquetipo. La idea es proporcionar apoyo y cuidado al público, creando una conexión basada en el afecto y la preocupación.
- Creador: Por aquí lo que se busca es innovar, crear, mejorar, sorprender y ofrecer soluciones únicas a los clientes.
- Rebelde: Desafiar las normas y romper con lo establecido. Si lo tuyo es cambiar las reglas del juego y desafiar el status quo, este es tu arquetipo de marca.
- Gobernante: El arquetipo del gobernante se centra en el control y el liderazgo. Ideal cuando el objetivo de la marca es establecerse como líder en su industria, transmitiendo confianza y autoridad.
El arquetipo de marca tiene que ser elegido de forma estratégica en función de los valores y objetivos de la marca. Y, ¡ojo!, que no tiene por qué ser uno u otro. Siempre puede priorizar un primero con toques de un segundo. Sea, como sea, siempre debe estar bien definido. Lo principal es no salirse de guion, eso sí.
Venga… ¿Sabrías decirnos cuál (o cuáles) es el nuestro?
Cómo usar los arquetipos para crear marcas poderosas
Ahora que ya tenemos claro qué son los arquetipos de marca, cuáles son y para qué sirven… ¿Vemos cómo utilizarlos para crear una marca poderosa y auténtica?
Pasito a paso:
AUTOCONOCIMIENTO: Antes de elegir el arquetipo para tu marca, date un paseo por el espejo. ¿Quién eres como marca? ¿Cuáles son tus valores fundamentales? Es esencial que conozcas a fondo tu marca para encontrar el arquetipo que mejor encaje tanto con lo que eres, como con lo que deseas comunicar.
CONOCE A TU AUDIENCIA: Y hablando de conocer…A tu audiencia tienes que conocerla mejor que a tu parienta, pariento o pariente. ¿Cómo? Escuchándola. ¿Qué motiva a tu público? ¿Qué les hace reír o llorar? La empatía, aquí, es clave.
COHERENCIA EN LA NARRATIVA: Una historia sin coherencia es como una película sin banda sonora. Tienes que integrar tu arquetipo en todos los aspectos de tu marca, desde el tono de voz hasta el diseño, para crear una narrativa sólida y reconocible.
DIFERENCIACIÓN: En esto si que no vale copiar. No estamos en el cole. En el mundo digital, hay mucho ruido. Para destacar lo suyo es una canción que se escuche por encima. Destaca o desaparece. No hay más opción, tienes que decidirte por un arquetipo que te diferencie de la competencia.
HUMANIZA TU MARCA: Los arquetipos son como el alma de tu marca. Humanizan la relación entre tu empresa y tu audiencia. No eres solo un producto o servicio. Muestra tu lado humano a través de tu arquetipo.
ADAPTACIÓN: Tu marca puede evolucionar sin perder su esencia. No tengas miedo de ajustar tu arquetipo si es necesario. La adaptación es importante para mantener tu marca fresca y en el candelero.
ESCUCHA CONSTANTE: Como en una conversación, escuchar es necesario para poder dar una buena respuesta. Observa cómo responde tu audiencia a tu arquetipo y ajusta tu estrategia según sea necesario.
AUTENTICIDAD: Los billetes falsos no le gustan a nadie. Y siempre, antes o después, se descubre que no son verdaderos. No elijas un arquetipo solo porque está de moda. La autenticidad cala hondo.
Más allá de productos o servicios, tienes que dar vida a tu marca. Construir una narrativa que cale a nivel emocional. En otras palabras, identificar y definir tu arquetipo en pro del reconocimiento de marca.
¡Hora de ponerse manos a la obra! Y si necesitas una ayudita para darle personalidad a tu marca… ¡Cuenta con nosotros!
