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Cómo hacer un estudio de mercado para entender a tu audiencia

Culpable... Marta Lobo

A veces, cuando intentas conectar con tus clientes, parece que hablas en otro idioma…

 

¿Te ha pasado?

 

Si tu respuesta es un sí, lo más probable es que estés pasando por alto el punto más importante: conocer de verdad a tu audiencia. 

 

Y aquí es donde entra en juego un buen estudio de mercado. La solución definitiva a tu problema. La vía para conocer (y entender) a tu audiencia y para adaptar tu estrategia digital para que tenga un impacto real. A fin de cuentas, para eso hemos venido a jugar, ¿no? 

 

Así que, te recomendamos que sigas leyendo, porque en este post vamos a desglosar el paso a paso de cómo hacer un estudio de mercado para conocer a tu audiencia como la palma de tu mano. 

 

¡Empezamos!

 

¿Qué es un estudio de mercado y por qué tienes que hacerlo?

 

Vamos a ponernos en situación.

 

Imagina que estás organizando una fiesta sorpresa. Tienes la decoración perfecta, la música ideal y hasta el menú es para chuparse los dedos. Pero resulta que a la persona homenajeada no le gustan ni esas canciones, ni esa comida… ¡Ni las fiestas sorpresa! Vaya chasco, ¿no? 

 

Pues lanzar un producto o servicio sin hacer un estudio de mercado es más de lo mismo.

 

Para meternos en harina: un estudio de mercado es el proceso que te permite conocer a fondo a tu nicho de mercado, es decir, a esas personas a las que te diriges. 

 

Se trata de recopilar y analizar datos sobre tus clientes potenciales, sus necesidades, sus hábitos de compra y también, claro, sobre tu competencia. 

 

¿Y obtendrás? Una visión super clara del panorama que te permitirá identificar oportunidades y amenazas que de otro modo podrías pasar por alto.

 

Ya te irás haciendo una idea de por qué es tan importante hacer un estudio de mercado, pero vamos a profundizar un poquito más en los motivos clave:

 

  • Conocer a tu cliente ideal: Un buen estudio te ayuda a definir y entender a tu buyer persona, esa representación de tu cliente perfecto basada en datos reales. Solo así podrás personalizar tus mensajes y estrategias de marketing para que lleguen a tu audiencia.



  • Reducir riesgos: Un estudio de mercado minimiza las posibilidades de lanzar un producto o servicio que no tenga aceptación en el mercado. Al conocer las necesidades y preferencias de tu audiencia, puedes ajustar tu oferta para que cumpla de verdad con sus expectativas.

 

  • Ajustar tu estrategia: También es la mejor manera de afinar tu estrategia digital y tus mensajes para conectar con tu público. Un mensaje bien enfocado llama mucho más la atención y aumenta las posibilidades de conversión.

 

  • Identificar oportunidades: Un estudio de mercado es como una pequeña bola de cristal a través de la que detectar nuevas tendencias o nichos desatendidos que podrías aprovechar para expandir tu negocio. Además, su magia también te ayudará a descubrir áreas donde puedes diferenciarte de la competencia.

 

  • Evaluar la competencia: Y hablando de la competencia, conocer lo que están haciendo tus competidores es vital para posicionarte estratégicamente en el mercado. Aquí no cabe discusión. Y un buen estudio de mercado te va a desvelar sus fortalezas y debilidades, dándote una ventaja competitiva importante.

 

Vamos, que un estudio de mercado no es un puñado de folios grapados que solo sirve para coger polvo en una estantería. Es la base sobre la que se construye una estrategia sólida. Sin él, corres el riesgo de lanzar productos o servicios que acaben en el olvido, incluso antes de que alguien se haya llegado a aprender su nombre.

 

6 pasos para hacer un estudio de mercado

 

Ahora que ya sabes por qué necesitas un estudio de mercado sí o sí, vamos al grano.

¿Cómo hacer un estudio de mercado? 

Por aquí te dejamos el paso a paso:

 

Paso 1: Define tu objetivo

Lo primero es tener claro por qué estás haciendo este estudio. ¿Vas a lanzar un nuevo producto? ¿Quieres entender mejor a tus clientes actuales? ¿O quizá estás pensando en entrar en un nuevo mercado? Definir un objetivo claro es la única forma de enfocar tu investigación y a recopilar la información más relevante.

 

Tener un objetivo claro desde el principio guiará estudio y te permitirá medir su éxito al final del proceso. Por ejemplo, si tu objetivo es identificar una nueva oportunidad de producto, podrás evaluar el éxito del estudio midiendo cuántas ideas viables surgieron de los datos recopilados.

 

Paso 2: Conoce a tu buyer persona

Aquí es donde el concepto de buyer persona cobra mayor importancia. Se trata de crear un perfil detallado de tu cliente ideal, basándote en datos demográficos, intereses, comportamientos de compra y necesidades. Cuanto mejor conozcas a tu audiencia, más fácil será adaptar tu mensaje y tus estrategias a lo que de verdad les importa.

 

Cuantos más detalles puedas reunir, más fácil será personalizar tus campañas y aumentar su efectividad.

 

Paso 3: Investiga tu nicho de mercado

Tu nicho de mercado es el segmento específico al que te diriges. Investiga a fondo este nicho para conocer quiénes son tus competidores, qué están haciendo bien y dónde están sus puntos débiles. Así, podrás identificar oportunidades y diferenciarte, por muy saturado que esté el mercado.

 

Pero, ¿qué incluye una buena investigación? Mira:

 

  • Análisis de la competencia: Identifica quiénes son tus principales competidores, qué productos o servicios ofrecen, y qué estrategias de marketing están utilizando.

 

  • Tendencias del mercado: Investiga las tendencias más punteras en tu sector y cómo están evolucionando. Así podrás anticipar cambios en la demanda y adaptarte veloz cual velociraptor.

 

  • Segmentación del mercado: Divide tu mercado en segmentos más pequeños y específicos. O, dicho de otra forma, en sub nichos. Aquí pon atención al detalle, porque no es raro que alguno pase inadvertido y no queremos eso. Queremos tenerlo todo bajo control. 

 

Paso 4: Recopila y analiza datos

Si ya tienes todo lo anterior, toca arremangarse y empezar a recopilar datos. Puedes hacerlo a través de encuestas, entrevistas, análisis de la competencia, o utilizando herramientas de análisis de mercado. Lo importante aquí es que no te quedes solo en los números; interpreta los datos para entender qué te están diciendo realmente.

 

¿Vemos algunas de las mejores formas de recopilar datos?

 

  • Encuestas: Una excelente manera de obtener información directa de tus clientes o de tu audiencia objetivo. Asegúrate de hacer preguntas tanto abiertas como cerradas para obtener una visión completa.

 

  • Entrevistas en profundidad: Permiten obtener insights más detallados y contextuales sobre las necesidades y motivaciones de los clientes.

 

  • Análisis de la competencia: Utiliza herramientas como SEMrush o SimilarWeb para analizar el tráfico y las estrategias de tus competidores.

 

  • Datos secundarios: Investiga estudios de la industria. Ya sabes, informes de mercado u otras fuentes secundarias para complementar tu investigación.

 

Paso 5: Toma decisiones basadas en los datos

Recoger información es solo el principio. Y todo ese trabajo no puede caer en saco roto. Ahora toca analizar esos datos y convertirlos en decisiones concretas. 

 

Si descubres, por ejemplo, que hay una alta demanda en un área específica de tu segmentación de mercado, quizás sea el momento de lanzar un nuevo producto o ajustar tu oferta actual para cubrir esa necesidad.

 

Y, ojo, al interpretar los datos, no dejes de buscar patrones y tendencias que puedan guiar tu estrategia. Aquí algunas preguntas que podrías hacerte:

 

  • ¿Qué productos o servicios son más demandados?
  • ¿Existen brechas en el mercado que puedas llenar?
  • ¿Qué factores están impulsando las decisiones de compra en tu nicho?

 

Las respuestas a estas preguntas te darán una base sólida para tomar decisiones informadas y estratégicas.

 

Paso 6: Implementa y monitorea

Llega lo bueno. Implementa las decisiones basadas en tu estudio de mercado y no olvides monitorear los resultados. El mercado cambia constantemente, y lo que funciona hoy puede no ser tan efectivo mañana. Así que, mantente alerta y ajusta tu estrategia digital según sea necesario.

 

Eso sí, recuerda que la implementación tiene que ser un proceso dinámico. No basta con poner en marcha una estrategia; debes seguir evaluando su desempeño y estar preparad@ en todo momento para hacer ajustes rápidos si los resultados no son los esperados.



La importancia del estudio de mercado en tu estrategia digital

 

Estudio de mercado

 

A estas alturas, seguro que ya tienes claro que un estudio de mercado no es un paso cualquiera en tu proceso de planificación. Es la base sobre la que se construye toda tu estrategia digital.

 

Cuando conoces bien a tu audiencia, puedes diseñar campañas de marketing que hablen su idioma, crear productos que realmente resuelvan sus problemas y ajustar tu oferta para destacar en el mercado. 

 

Tu marketing de contenidos mejorará notablemente y la toma de decisiones informada te permitirá moverte con confianza.

 

Adiós a las suposiciones y a las conjeturas. Tener las cosas claras minimiza los riesgos. En esto y en todo.

 

En definitiva, saber cómo hacer un estudio de mercado, hacerlo y basarte en él para cada paso que des debería ser obligatorio por ley. 

 

Que no te quepa duda. Es una de las inversiones de tiempo y recursos más rentables en esto del marketing digital.

 

Y hablando de marketing… ¿Te echamos una mano para sacar el máximo partido de tu estrategia? O a crear una desde cero, cómo prefieras. Por aquí estamos.

 

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